Concluido en 1997, este proyecto de viviendas para 70 familias de bajos ingresos en Tokio es un ejemplo de cómo la vivienda sostenible en lo social y medioambiental puede ser desarrollada en una de las ciudades más densamente urbanizadas en el mundo.
El diseño perceptivo ambientalmente asegura que el uso de la energía sea reducido significativamente, al mismo tiempo que los niveles de confort son mayores. La integración social y la participación comunitaria han sido los elementos claves del proyecto, propiciando un tejido social estrecho de grupos de ancianos como de jóvenes.
Los costos no son altos en comparación con otros proyectos de vivienda pública y el proyecto está encabezando un debate en el Japón sobre vivienda pública sostenible. Al presente, proyectos similares están siendo desarrollados en otras ciudades del Japón.
Asociación
Académico/Investigador, Comunidad Local, Gobierno local