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Un proyecto innovador que pretende hacer frente a la urgente crisis de la vivienda en Namibia ha sido galardonado con el prestigioso Premio Mundial del Hábitat de Bronce.
El Namibia Housing Action Group and the Shack Dwellers Federation of Namibia ha ganado el premio gracias a su trabajo para ayudar a las comunidades del país, donde la mayoría de la población urbana vive en asentamientos informales con poco o ningún acceso a los servicios básicos y sin derechos sobre la tierra.
La organización trabaja con la población para formalizar la propiedad de la tierra, cubrir las necesidades de infraestructuras y acceder a fondos para mejorar las viviendas o construir otras nuevas.
Los Premios Mundiales del Hábitat, organizados por Hábitat Mundial en colaboración con ONU-Hábitat, son los galardones más importantes del mundo en materia de vivienda y reconocen y destacan ideas, proyectos y programas innovadores, sobresalientes y revolucionarios de todo el mundo.
El galardonado programa de vivienda comunitaria y mejora de asentamientos informales, dirigido por el Namibia Housing Action Group y la Shack Dwellers Federation of Namibia, se basa en asociaciones con el gobierno y las autoridades municipales.
Tras la independencia de Namibia en 1990, el país experimentó una migración masiva de las zonas rurales a las urbanas, donde la falta de desarrollo de viviendas e infraestructuras provocó un rápido crecimiento no planificado en las principales ciudades.
El 89% de los namibios no cumplen los requisitos para obtener préstamos hipotecarios convencionales y no pueden acceder a viviendas comerciales. Como consecuencia, cada año se construyen 12.000 nuevas viviendas informales.
Sin embargo, la tarea de formalizar y mejorar estos asentamientos es de enorme envergadura y demasiado grande para que el Gobierno la afronte solo.
Desde su inicio en 2013, el plan se ha aplicado en 20 centros urbanos y 31 asentamientos informales, en 10 de las 14 regiones de Namibia, lo que lo convierte en uno de los mayores proyectos de este tipo en el país.
En total, ya se han construido o mejorado 3.873 viviendas con servicios de agua y saneamiento durante los últimos 10 años, lo que ha beneficiado directamente a 25.000 personas.
Como parte del proyecto, se lleva a cabo un estudio del asentamiento, en el que se estudia dónde podrían ubicarse las carreteras, las zonas comunes y las instalaciones de agua y saneamiento, y a partir de ahí se elabora un plan de asentamiento que se presenta a la autoridad local para su aprobación.
Esto puede incluir el uso de la Ley de Tenencia Flexible de la Tierra de 2012 para proporcionar seguridad de tenencia a las personas que viven en asentamientos informales.
El Grupo de Acción para la Vivienda de Namibia creó un fondo de desarrollo comunitario que concede préstamos a los miembros de los grupos de ahorro de la Federación de Habitantes de Chabolas de Namibia para la adquisición de tierras, el mantenimiento de los terrenos, la mejora de las viviendas y la construcción. El fondo recibe aportaciones del gobierno, el sector privado, financiadores externos y miembros de los grupos de ahorro.
El proyecto en curso prevé expandirse por el país mejorando 34.000 viviendas en los próximos tres años.
Robson Mazambani, de 29 años, es miembro de la Federación de Chabolistas de Namibia. Conoció la Federación tras mudarse a la zona urbana de Gobabis. Empezó a asistir a reuniones comunitarias en las que otros residentes hablaban de cómo mejorar sus asentamientos informales y, en última instancia, sus condiciones de vida.
Dijo: «Cuando me incorporé, era una persona tímida que no hablaba mucho en las reuniones, pero gracias a las interacciones regulares con los miembros de la comunidad y el consejo, conocí muchas ideas y personas diferentes. Ahora comparto mis conocimientos con las comunidades que participan o planean mejorar su asentamiento informal. Ahora puedo hacer una presentación ante la comunidad y convencerla de por qué es importante que nosotros, los miembros de la comunidad, participemos en nuestro propio desarrollo.
«No sólo es importante para nosotros, sino para todos, porque la crisis de la vivienda en Namibia debería preocuparnos a todos. Mis conocimientos y mi voluntad de aprender me han llevado hasta donde estoy hoy y me siento orgulloso de ser propietario de una casa de ladrillo. Salí de una choza y ahora vivo en una casa formal con mi familia».
David Ireland, Director Ejecutivo de Hábitat Mundial, afirmó: «Este proyecto está respondiendo con éxito a la urgente necesidad de abordar la crisis de los asentamientos informales en Namibia. Con el fondo rotatorio, el proyecto ha desarrollado un modelo sostenible y ampliable que alivia la carga y los gastos de las autoridades públicas, que no tienen capacidad para abordar el problema por sí solas.
«Demasiadas comunidades han experimentado la mejora de los barrios marginales con un planteamiento descendente, por lo que es fantástico ver que la gente del proyecto de Mejora de la Vivienda y los Asentamientos Informales Impulsada por la Comunidad en Namibia ha tomado el control del sistema por sí misma. Llevaron a cabo su propia planificación, pidieron prestado su propio dinero y transformaron ellos mismos sus barrios».
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