La ciudad de Springfield es una de las comunidades más pobres y con mayor diversidad étnica del estado de Massachusetts, Estados Unidos. Prácticamente una de cada tres personas (29,7 por ciento) vive por debajo de la línea de pobreza, y casi la mitad de la población (48 por ciento) es no caucásica. El parque de vivienda de la ciudad es antiguo: dos de cada cinco casas (40 por ciento) se construyeron antes de 1940 y la gran mayoría (86 por ciento), antes de 1980. Estas casas viejas presentan una gran cantidad de problemas, como humedad, hongos y plagas. Aproximadamente un 89 por ciento de las casas de Springfield se construyeron antes de que la pintura con plomo se considerara ilegal en 1978, hecho que se evidencia en índices de intoxicación por plomo tres veces superiores a los del promedio del estado.

Entre 2011 y 2013, Springfield sufrió daños por una serie de tornados. Muchos propietarios no tenían sus casas aseguradas o las pólizas de seguros no eran adecuadas para cubrir el costo de las reconstrucciones o reparaciones. Estos desastres – y la devastación que provocaron en comunidades que ya sufrían dificultades – inspiraron un proyecto para reconstruir y reparar casas y espacios comunitarios en Springfield, con el objetivo de mejorar la calidad de vida y la salud, y de generar un sentido de orgullo cívico entre los residentes.

La dirección del proyecto Reconstrucción de Barrios #GreenNFit está a cargo de la organización sin fines de lucro Revitalize Community Development Corporation. Esta reúne a miles de voluntarios para renovar una manzana de la ciudad por año en un solo día, durante 10 años. El proyecto de Springfield empezó en el barrio Old Hill, en enero de 2012 y finalizó tres años antes de lo previsto, en 2019 (debido a que se realizaron trabajos en más de una manzana por vez).

El proyecto benefició a todo el barrio Old Hill (4.371 personas), incluidos 191 grupos familiares cuyas casas se repararon. Algunas de las mejoras consistieron en el desarrollo de un parque de juegos y dos jardines comunitarios nuevos, la limpieza de 33 terrenos baldíos, y mejoras en 5 instalaciones sin fines de lucro y en una escuela para estudiantes en situación de riesgo.

A pedido de los administradores de la ciudad, el modelo se expandió a la ciudad vecina de Holyoke, donde más de la mitad de la población es no caucásica, y un 28,6 por ciento de los habitantes vive por debajo de la línea de pobreza, incluido un 29 por ciento de niños – el índice más alto de Massachusetts. El primer día masivo de renovación de Holyoke tuvo lugar en octubre de 2016. Desde entonces, Revitalize CDC reparó 19 casas más e invirtió más de 600.000 dólares en la ciudad.

El proyecto en la práctica

El proyecto #GreenNFit incluye una planificación inicial que comienza con un trabajo conjunto de organizaciones populares, residentes, departamentos municipales, centros vecinales y organizaciones sin fines de lucro, para identificar las áreas y los residentes con más necesidades.

Todos los miembros de la comunidad pueden participar en el proyecto y se los alienta especialmente a que ayuden en las tareas de renovación de sus propias casas. Estos trabajos se ofrecen según las capacidades de las personas, por ejemplo, pueden ayudar a servirles refrigerios a los voluntarios, hacer tareas de construcción sencillas o participar en la limpieza, las actividades de jardinería y otras labores no especializadas. Los trabajos técnicos de construcción, como mejoras eléctricas, tratamiento de humedad y hongos, y sustitución de techos, están a cargo de profesionales capacitados.

Los proveedores voluntarios ayudan con tareas en terrenos baldíos, como espacios verdes y parques de juegos en desuso. Estas áreas se limpian y reparan, o se reconstruyen para volver a utilizarse como espacios públicos. Algunas áreas verdes en desuso se han transformado en jardines comunitarios con árboles frutales y huertas.

Revitalize CDC invierte aproximadamente 0,5 millones de dólares en cada renovación anual de manzana. Esto cubre los costos de funcionamiento, como difusión en la comunidad, gestión del programa y del proyecto, materiales de construcción, mano de obra capacitada, comida y agua para los voluntarios, camisetas, redes sociales y almacenamiento de materiales. Los fondos se recaudan mediante donaciones en dinero y especies de una variedad de organizaciones filantrópicas locales, estatales, federales y privadas. El proyecto también recibió subsidios de corporaciones y fundaciones privadas.

Uno de los aspectos más innovadores del proyecto es la movilización de grandes cantidades de personas para que realicen trabajo voluntario en una sola manzana por un único día. Revitalize CDC estima que el proyecto recibe el equivalente a 229.440 dólares en trabajo voluntario por año, y casi todos los voluntarios (90 por ciento) vuelven a participar cada año para apoyar el proyecto. Al sumar los materiales, Revitalize CDC calculó que el valor total del apoyo de la comunidad en el día de renovación masiva de 2019 en Springfield fue de 486.000 dólares.

Los propietarios de las casas reciben todos los servicios sin costo alguno, lo que convierte a Revitalize CDC en la única organización de la región que ofrece reparaciones de casas totalmente gratis (sin gravámenes, préstamos ni embargos).

Impacto social y ambiental

Durante el proceso de renovación, que tiene un impacto ambiental menor que la demolición y la reconstrucción posterior, se utilizan productos reciclados y respetuosos con el medioambiente. El programa trabaja con diversas instituciones para reciclar los residuos, y los materiales excedentes se donan a otras organizaciones. La pintura que sobra se les proporciona a los propietarios, a fin de que puedan usarla para el mantenimiento de sus casas.

Las casas más viejas requieren más calefacción, lo que incrementa el consumo de combustible, gas y electricidad. Revitalize CDC realiza mejoras clave para la economización de electricidad, como reparaciones de las unidades de calefacción, ventilación y aire acondicionado, la instalación de sistemas de aislamiento y ventanas de doble vidrio, instalaciones de plomería para el ahorro de agua, y techos nuevos.

Al ejecutar estas mejoras sin cargo, #GreenNFit ayuda a reducir las desigualdades sociales en los barrios de bajos ingresos, en los que las personas no pueden costear las tareas de mantenimiento o mejora de sus casas. El proyecto trata el aislamiento social y promueve valores comunitarios compartidos. Estudiantes jóvenes han establecido vínculos con residentes de mayor edad, que conservan más allá de #GreenNFit, y se alienta a los beneficiarios a que participen en eventos futuros como voluntarios.

Los vecinos se involucran y conectan más durante todo el proyecto, lo que convierte a las comunidades en lugares más sanos y seguros para vivir. El redesarrollo de espacios abiertos evita el mal uso de los terrenos públicos, alienta la participación y la sociabilización a través de una cantidad mayor de actividades deportivas y de ocio, y puede disminuir los niveles de delincuencia.

Las renovaciones de las casas generan mejoras en la optimización de la calefacción, una disminución en las facturas de servicios (las familias ahorran, en promedio, entre 700 y 800 dólares por año) y una salud mejor para los residentes que padecen afecciones relacionadas con la humedad, los hongos y la calefacción deficiente. Las modificaciones que se realizan en las viviendas, como rampas de acceso, ayudan a evitar lesiones y enfermedades, y les permiten a los ancianos y a las personas con discapacidades permanecer en sus hogares.

Todos los propietarios de casas de #GreenNFit reciben asistencia de Revitalize CDC para poder negociar planes de pago de impuestos atrasados.

El futuro

El proyecto #GreenNFit depende de su programa de voluntariado, que está muy bien coordinado, y de su eficiente programa local de donaciones y recaudación de fondos. El éxito de dichos programas en Springfield y Holyoke contribuyó a la generación de más ingresos para la organización, que está ampliando su alcance para ayudar a veteranos de guerra a hacer reparaciones y modificaciones fundamentales en sus hogares. Este trabajo tendrá lugar de 2019 a 2022, con la financiación de un subsidio de tres años de 730.000 dólares del Programa Piloto para la Modificación y Rehabilitación de Viviendas de Veteranos del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD, por su sigla en inglés).

Las labores de Revitalize CDC en Springfield y Holyoke despertaron el interés de otras comunidades, que desean llevar a cabo proyectos similares, y la organización proporcionó asesoramiento y atendió consultas de ocho ciudades de Estados Unidos.

Al ganar acceso a la larga tradición estadounidense de construcción y renovación de casas, #GreenNFit ha generado una manera muy efectiva de ofrecer una acción comunitaria de gran escala. El proyecto proporciona mejoras tangibles para casas y espacios públicos, lo que fortalece los lazos sociales y reduce las desigualdades entre las personas que viven en algunos de los barrios más pobres del país.

Vea el resumen completo del proyecto aquí – disponible sólo en Inglés