Descripción del Proyecto

Muchos centros históricos de pueblos y ciudades en El Salvador han sufrido de años de abandono y falta de inversión. La vivienda en estas zonas se encuentra generalmente en mal estado, con falta de servicios básicos y poniendo a los residentes en riesgo de desalojo y de mala salud.

A través de un programa de capacitación, financiamiento y colaboración, una red de organizaciones que incluye a FUNDASAL (la Fundación Salvadoreña de Desarrollo y Vivienda Mínima), FESCOVAM (la federación salvadoreña de cooperativas de vivienda por ayuda mutua) y FUCVAM (la federación uruguaya de cooperativas de vivienda por ayuda mutua), ha trabajado para ayudar a la comunidad local para establecer las primeras cinco cooperativas de vivienda por ayuda mutua[1] en el centro histórico de la ciudad.

Con capacitación y apoyo, las cooperativas del centro histórico de San Salvador  convencieron al Gobierno salvadoreño de la importancia cultural de su barrio y de su derecho a ser alojados allí de manera segura.

En 2008, la Alcaldía Municipal de San Salvador facilitó un terreno a precio nominal. Los otros dos fueron compras de terreno realizadas a privados. FUNDASAL recaudó fondos para cubrir la capacitación técnica para ayudar a los residentes a diseñar y construir sus hogares. Dos de las primeras cinco cooperativas, ACOVICHSS y ACOVIVAMSE, reemplazaron y/o renovaron edificios en decadencia en el centro de la ciudad, utilizando diseños inspirados por sus características históricas . En lugar de utilizar tierras nuevas, los edificios existentes fueron reemplazados y extendidos hacia arriba. Ellos diseñaron los nuevos edificios para que incluyan espacios públicos compartidos y designaron zonas para actividades comerciales. Las cooperativas construyeron coloridos bloques de muchos pisos, diseñados alrededor de un patio central para maximizar la luz natural y la ventilación. Este programa integral ha revitalizado el centro de la ciudad y creado un sentido de orgullo en la comunidad. (Actualmente se están gestionando proyectos habitacionales en las tres otras cooperativas).

Para 2013, ACOVICHSS y ACOVIVIVAMSE habían construido 61 hogares en tres torres, alojando a 240 personas. El 70% de estas son familias con mujeres como jefas de hogar, generalmente viviendo con muy bajos recursos y en empleo informal. El trabajo para establecer nuevas cooperativas en el centro histórico  se enfocó deliberadamente en las familias más pobres (mujeres, niños y jóvenes). Su situación hacía que fuera muy difícil recaudar dinero o tomar préstamos, pero a través de trabajar juntas, las cooperativas lograron el reconocimiento legal y obtuvieron tierras de parte del Gobierno para construir y gestionar su propia vivienda.

La asequibilidad está asegurada para aquellos que viven en las nuevas cooperativas, incluso para aquellos de muy bajos recursos. Esto se logra a través de una combinación de ayuda mutua (derecho por trabajo – contribuir a cubrir los costos con trabajo), lo cual disminuye los costos totales de construcción, el subsidio de los patrocinadores y de todos los miembros al contribuir a un Fondo de Asistencia común que ayuda a miembros vulnerables cuando enfrentan dificultades financieras temporarias.

Para 2017, ocho cooperativas de vivienda por ayuda mutua más (13 en total) se habían formado en el centro histórico. El esfuerzo colectivo de las cooperativas de vivienda y de las organizaciones y redes que las apoyan ayudó a convencer al gobierno salvadoreño de recaudar €9.000.000 (US$ 10.043.820), a través de un acuerdo con el Gobierno de Italia. Esto proporcionará nuevos hogares para otras 325 familias más (1.300 personas). Este es un logro destacable, ya que demuestra un compromiso del gobierno de asegurar vivienda adecuada y asequible para los residentes del centro de la ciudad, abriendo el camino para que más personas reclamen su derecho a la tierra y a la vivienda segura.

[1] Las cooperativas de vivienda por ayuda mutua implican que las personas trabajen juntas y se apoyen unas a otras para crear sus propios hogares. El enfoque utiliza el ‘derecho por trabajo’, lo cual significa que la gente contribuye a cubrir el costo de la construcción de sus hogares con su propio trabajo. Los hogares son propiedad colectiva de los miembros de la cooperativa.

Fines y Objetivos

Los fines principales de este programa son apoyar a familias locales para apropiarse y mejorar sus propias viviendas, y preservar y proteger el centro histórico de San Salvador. La comunidad junto con FUNDASAL, FESCOVAM y otras redes están trabajando para:

  • Proteger a las familias de ser expulsadas fuera del centro histórico a través de ayudarlas a acceder legalmente a la tierra y asegurar que sus costos de vivienda sean asequibles.
  • Mejorar los hogares de las familias que viven en malas condiciones, asegurando que tengan acceso a los servicios básicos.
  • Recuperar el centro histórico de San Salvador para beneficio de toda la comunidad.
  • Evitar la necesidad de expansión de los asentamientos informales afuera del centro de la ciudad.
  • Apoyar a toda la comunidad a prosperar a través de una variedad de actividades culturales, artísticas y educacionales, incluyendo a personas que son generalmente excluidas (tales como mujeres, niños, jóvenes, personas mayores o personas con discapacidad).

Las metas de largo plazo del programa son:

  • Establecer cooperativas de vivienda por ayuda mutua a lo largo de El Salvador que puedan trabajar juntas para desarrollar su propia vivienda.
  • Apoyar a las cooperativas de vivienda por ayuda mutua a influenciar al Gobierno para que reconozca a la vivienda como un derecho humano y proporcione financiamiento y tierras para vivienda.
  • Asegurar que todos los residentes del centro histórico de San Salvador sean alojados adecuadamente y con seguridad.

Contexto

Antes de 2001, el centro histórico de San Salvador se encontraba en estado de deterioro, sin que el gobierno ni el sector privado le presten mucha atención. El 29% de la población del centro vivía en asentamientos informales, caracterizados por la falta de servicios básicos, hacinamiento, riesgo de desalojo y un ambiente no saludable debido al mal saneamiento y disposición de residuos. Muchas de las personas viviendo en estas condiciones eran muy vulnerables, con grandes cantidades de mujeres y jóvenes de muy bajos recursos. El 84% de las familias en los asentamientos informales vivían con menos de un cuarto del salario mínimo (US$ 55 mensuales, comparado con  el salario mínimo de US$ 220). El 57% de las mujeres trabajan en el empleo informal.

Hasta inicios de la década de 2000, el gobierno local de El Salvador alentó la regeneración del centro histórico, pero su foco había sido solamente en las mejoras culturales y económicas, en lugar de mejoras en vivienda y espacios públicos. FUNDASAL reconoció que cualquier regeneración de este tipo traía consigo un riesgo de desalojo o gentrificación, ya que no existía una apropiación del proceso de parte de los residentes existentes. Esto se debió al aumento de costos, ya que estos hogares se tornaron más atractivos para grupos de mayores ingresos, o porque las casas serían demolidas sin haber construcción de vivienda nueva. Este tipo de regeneración sería desastroso para las personas de bajos recursos de la comunidad local, ya que serían expulsados hacia los asentamientos informales y lejos de sus raíces en el centro histórico.

Características clave

Se ayuda a las personas de la zona para que puedan conseguir vivienda permanente y segura por sí mismos a través de cooperativas de vivienda por ayuda mutua. Las características más importantes del enfoque de ayuda mutua en relación a este proyecto son la propiedad y gestión colectiva de la vivienda. Todas las decisiones son tomadas por los miembros de las cooperativas de vivienda (las personas que viven o planean vivir en los hogares). Ellos organizan sus propios comités para diseñar y construir hogares, lo cual también crea fuertes vínculos entre los residentes ya que trabajan juntos en la toma de decisiones. FUNDASAL brinda asesoramiento técnico y ayuda a atraer financiamiento para las nuevas cooperativas de vivienda. Ellos llevan a cabo programas de capacitación y educación, y brindan apoyo flexible a cada grupo. Los miembros de las nuevas cooperativas de vivienda comparten conocimientos y alientas a otros a unirse a su cooperativa o a crear una nueva.

Dentro de este proyecto, una meta importante para FUNDASAL y las comunidades con las que trabajan es la protección y preservación del centro histórico de San Salvador. Esto se logró a través de alojar a las familias en torres de muchos pisos y de alta calidad que están diseñadas con el estilo arquitectónico local en mente, en lugar de construir afuera del centro de la ciudad. Esta vivienda nueva reemplazó las chozas de muy mala calidad que antes habían ocupado y alquilado. El trabajo de las cooperativas de vivienda, FUNDASAL y la comunidad más amplia para mejorar el centro histórico se ha extendido a los espacios comunes tales como patios y parques infantiles, un huerto de plantas aromáticas y hortalizas del centro de la ciudad y coloridos murales que han revitalizado la zona.

Muchas organizaciones colaboraron con las nuevas cooperativas y con FUNDASAL para lograr el rescate del centro histórico:

  • FUNDASAL (la fundación salvadoreña de desarrollo y vivienda mínima): Trabaja con las comunidad para organizar capacitación, financiamiento y apoyo, para aumentar el número de cooperativas de vivienda por ayuda mutua en todo El Salvador)
  • FUCVAM (Federación uruguaya de cooperativas de vivienda por ayuda mutua): ayudó a transferir su enfoque de establecer cooperativas de vivienda por ayuda mutua a San Salvador (este enfoque de transferencia ganó el Premio Mundial del Hábitat en 2012).
  • FESCOVAM (la federación salvadoreña de cooperativas de vivienda por ayuda mutua): apoyó el trabajo para ejercer incidencia política ante el Gobierno.
  • Gobierno local de San Salvador: vendió tierras a las cooperativas de vivienda a un precio simbólico.
  • FPDICHSS (Foro Permanente para el Desarrollo Integral del Centro Histórico de San Salvador): Una alianza de distintas organizaciones y grupos que trabajan juntos para proteger el centro histórico de San Salvador. Las cooperativas de San Salvador han estado activas en este grupo desde 2005. FUNDASAL se convirtió en miembro en 2007. FUNDASAL han sido parte del Foro desde el año 2005 y las cooperativas se han integrado a través de la representación de FESCOVAM entre sus participantes a partir del 2015.

¿Qué impacto ha tenido?

El trabajo de apoyar a la regeneración liderada por la comunidad en el centro histórico de San Salvador ha resultado en vivienda segura para una cantidad creciente de gente que previamente vivía en muy malas condiciones, con riesgo de desalojo en edificios inseguros. El proyecto ayudó a convertir el barrio en un lugar más seguro para vivir a través de reemplazar edificios deteriorados con nuevas torres de apartamentos, y proporcionando espacio público de calidad. El trabajar juntos y realizar actividades juntos, tales como cultivar sus propios alimentos, ha ayudado a desarrollar relaciones más cercanas y de apoyo entre la comunidad.

El gobierno local y nacional, las organizaciones de la sociedad civil y el sector académico han reconocido el éxito del enfoque en cuanto a mejorar la vivienda y fortalecer las comunidades. En 2008 se logró el reconocimiento oficial y legal de centro histórico de la ciudad de San Salvador de parte del Gobierno de El Salvador. También se reformaron los estatutos de las cooperativas de vivienda por ayuda mutua, lo cual permitió que estas fueran legalmente reconocidas. Esto llevó a la asignación de tierras publicas y financiamiento para que las cooperativas puedan construir sus nuevos hogares.

Estas actividades y los logros del  trabajo de FUNDASAL y de la federación salvadoreña de cooperativas de vivienda por ayuda mutua (FESCOVAM) llevó a una nueva Política Nacional sobre Vivienda y Hábitat en 2015. Actualmente se debate la incorporación de una nueva Ley Nacional de Vivienda y Hábitat (en 2017). FUNDASAL y FESCOVAM también están influenciando las conversaciones sobre la aplicación de la Nueva Agenda Urbana en El Salvador.

¿Cómo se financia?

El financiamiento para apoyar la regeneración del centro histórico de San Salvador para este programa se enfocó en tres áreas:

Investigación y Cabildeo

  • CORDAID y MISEREOR (organizaciones católicas no-gubernamentales que ayudan a la gente que vive en la pobreza y en peligro) brindaron financiamiento para apoyar la investigación de FUNDASAL y su trabajo en la promoción de cooperativas de vivienda por ayuda mutua frente al gobierno y otros.
    • CORDAID US$ 333.292 (2001-2008)
    • MISEREOR US$ 143.743 (2006-2008)

Capacitación y fortalecimiento de lazos comunitarios

  • WeEffect – brindó financiamiento para iniciativas de capacitación y educación relacionadas a la regeneración de San Salvador desde 2004. Esto incluye:
    • De 2004 a 2007, US$ 609.360 para capacitar al Equipo de Apoyo Técnico de FUNDASAL, para que puedan asesorar a las cooperativas de vivienda en la gestión financiera y métodos de construcción.
    • De 2008 a 2016, US$ 1.802.029 para establecer una Escuela de Capacitación de Cooperativas en Centro América (Honduras, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y El Salvador); capacitar a cooperativas para cultivar sus propios alimentos en el centro de la ciudad; brindar mayor capacitación para el Equipo de Apoyo Técnico de FUNDASAL; apoyar proyectos específicos de ACOVIVAMSE y ACOVICHSS (cooperativas de vivienda) tales como un proyecto de la comunidad para pintar murales.
    • En 2017, US$ 292.800 para apoyar mayor capacitación para el Equipo de Apoyo Técnico de FUNDASAL.
  • Vastenactie (una organización católica de asistencia con sede en los Países Bajos) proporcionó US$ 13.113 (2014-2015) para apoyar la capacitación de cooperativas en el centro histórico de San Salvador en la creación de huertos organopónicos
  • FUNDASAL
    • Brinda apoyo técnico a las comunidades que desean cultivar sus propios alimentos dentro de la ciudad.
    • Brinda prestamos ‘de arranque’ para ayudar a establecer nuevos negocios locales y otras actividades que fortalecen a la comunidad.

Construcción

  • AECID (la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo) brindó una combinación de financiamiento de subsidios y préstamos para ACOVICHSS (Asociación Cooperativa De Vivienda Por Ayuda Mutua Del Centro Histórico De San Salvador), una de las primeras cooperativas de vivienda en construir sus nuevos hogares a través del proyecto.
    • Financiamiento para ACOVICHSS de parte de AECID: US$ 1.067.064 (2008-2010) para tierras y construcción de dos complejos de viviendas.
  • FUNDASAL estableció un fondo rotativo de préstamos para apoyar a las cooperativas de vivienda por ayuda mutua, por lo que los reembolsos de un proyecto en El Salvador pueden ser utilizados para financiar el siguiente. Con el apoyo de KfW (un banco de desarrollo de propiedad del gobierno alemán), hasta ahora una cooperativa de vivienda en El Salvador (ACOVIVAMSE, Asociación Cooperativa de Vivienda por Ayuda Mutua San Esteban) ha sido parcialmente financiada de esta manera. Este enfoque de financiamiento reciclado continuará apoyando nuevos proyectos.
    • Financiamiento de subsidios y préstamos para ACOVIVAMSE (del fondo rotativo de FUNDASAL con apoyo de KfW): US$ 837.901 (2011-2013) para tierras y construcción de vivienda.

Para continuar el trabajo de regeneración del centro histórico de San Salvador en el futuro, el financiamiento incluirá:

  • El reembolso de los préstamos de ACOVICHSS (cooperativa de vivienda) serán reinvertidos por AECID (la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo). Este está compuesto de dos préstamos que serán reembolsados por la cooperativa durante 15 años.
    • Préstamo AECID: US$ 30.016 (otorgado en 2009) a ser devuelto durante 15 años en cuotas de $300 por mes.
    • Préstamo AECID: US$ 22.512 (otorgado en 2011) a ser devuelto durante 15 años en cuotas de $225 por mes.
  • Los reembolsos de ACOVIVAMSE (cooperativa de vivienda). Estos regresarán al fondo rotativo establecido por FUNDASAL y KfW. Los reembolsos serán devueltos durante 20 años. El monto del préstamo es US$ 293.747 más un préstamo adicional de US$2.549, el cual fue otorgado en 2013.
  • El financiamiento de €9.000.000 (US$ 10.043.820) contribuido por el Gobierno de Italia para el Gobierno de El Salvador, lo cual será utilizado para apoyar a nuevas cooperativas de vivienda para continuar formando y construyendo nuevos hogares en el centro histórico de El Salvador (2018-2020).

Los costos de construcción de los nuevos hogares son los siguientes:

  • Torres de viviendas construidas por la cooperativa de vivienda ACOVIVAMSE: US$ 29.775.
  • Torres de viviendas construidas por la cooperativa de vivienda ACOVICHSS: US$ 50.797 (los costos son más altos que los arriba mencionados porque, en este caso, los costos del tratamiento del suelo fueron muchísimo más altos).
  • Torres de viviendas a ser financiadas por el Gobierno de El Salvador (2018-2020) utilizando fondos del Gobierno de Italia: US$ 27.692.

¿Por qué es innovador?

  • Esta es la primera vez que se establecen cooperativas de vivienda por ayuda mutua en el centro histórico de una ciudad. Esto logró la regeneración de San Salvador para beneficio de sus residentes. Los residentes, apoyados por FUNDASAL y FESCOVAM, han construido una comunidad fuerte e independiente, comenzando con los más vulnerables y excluidos. Una gama de actividades educacionales y de capacitación han desarrollado la confianza, salud y bienestar de los residentes del centro histórico de San Salvador. El fondo rotativo que FUNDASAL estableció con KfW significa que los reembolsos de una cooperativa puede ayudar a otras en el futuro..
  • El enfoque de construir hacia arriba en lugar de hacia afuera y reemplazar edificios existentes ha permitido a la comunidad permanecer unida mientras que se protege la zona más amplia. Esto ha preservado las características históricas del centro de San Salvador, recuperando parte su carácter utilizando diseños que complementan su estilo original y reemplazando edificios previamente dañados por desastres.
  • Los nuevos edificios también incorporan características bioclimáticas. Están diseñados para trabajar con el clima local para brindar confort. Los elementos básicos del diseño bioclimático incluyen sistemas solares pasivos que son incorporados en los edificios y utilizan fuentes ambientales (por ejemplo, el sol, viento, vegetación, agua, etc.) para calefacción, refrigeración e iluminación en los edificios[1].
  • El trabajo de FUNDASAL y otros asociados ayudó a lograr reconocimiento legal, financiamiento y apoyo para cooperativas de vivienda por ayuda mutua del Gobierno en El Salvador. Esto significa una voz más fuerte para FESCOVAM (la federación salvadoreña de cooperativas de vivienda por ayuda mutua) y sus miembros en debates sobre políticas de vivienda.

[1] http://www.cres.gr/kape/energeia_politis/energeia_politis_bioclimatic_eng.htm

¿Cuál es el impacto medioambiental?

Las cooperativas de vivienda en el centro histórico de San Salvador reemplazaron a los edificios existentes en lugar de construir nuevos afuera del centro. Esto significa que se puede brindar hogares mejorados mientras que se protege la zona más amplia del daño ambiental causado por la construcción de edificios nuevos. El utilizar tierra sobre la cual ya se había construido significa que se utiliza infraestructura existente. Es más probable que los servicios básicos tales como sistemas de agua y cloacas estén instalados o disponibles localmente.

Las propiedades están diseñadas alrededor de un patio central, lo cual significa que se puede utilizar el aire y la luz natural para iluminación y ventilación, y los edificios son más resistentes ante los desastres naturales. Debido a que ahora las comunidades están bien organizadas, esto también mejora su habilidad para responder a los desastres naturales.

Las cooperativas han comenzado a cultivar alimentos dentro del centro de la ciudad utilizando huertos organopónicos (orgánicos) de plantas aromáticas y hortalizas. Esta es una forma de agricultura urbana que puede ser replicada. Generalmente utiliza muros bajos de hormigón rellenos con materia orgánica y tierra, con líneas de irrigación por goteado colocadas en la superficie.

¿Cómo es su sostenibilidad financiera?

  • Los nuevos edificios incluyen hogares y espacios comerciales en la planta baja, para que las cooperativas de vivienda puedan establecer negocios tales como talleres o espacios comerciales para generar ingresos para la economía local.
  • Los huertos establecidos en el centro histórico también ayudarán a proporcionar alimentos asequibles para familias locales.
  • El enfoque ha asegurado que las personas que viven en las cooperativas de vivienda puedan pagar el costo de las nuevas viviendas a través de definir costos máximos de vivienda en base a la capacidad de pago de los miembros.
  • La capacitación de algunos miembros de las cooperativas de vivienda los ayudó a encontrar empleos en la construcción, proporcionando trabajo y estabilidad financiera.
  • Para garantizar vivienda segura para los miembros de la comunidad involucrados en el proyecto, se estableció un fondo para cubrir cualquier déficit en los pagos de vivienda: el Fondo de Asistencia, que utiliza contribuciones de los miembros de las cooperativas.
  • Un fondo de ‘Nuevos Emprendimientos’, ayuda a establecer nuevas actividades productivas. La cooperativa decide cómo se re-invierten estos recursos en base al desempeño de estos emprendimientos.

Mientas que el financiamiento inicial provino de organizaciones donantes externas, el nuevo financiamiento del Gobierno representa un cambio en su actitud. El Gobierno se ha comprometido a este financiamiento de 2018 a 2020, y FUNDASAL y FESCOVAM están dialogando (en 2017) con el Gobierno salvadoreño sobre una nueva Ley Nacional sobre Vivienda y Hábitat.

¿Cuál es el impacto social?

Este trabajo ha mejorado las condiciones de vida para algunos de los residentes más pobres de la ciudad, quienes han conseguido el derecho a permanecer dentro del centro histórico y de mantenerse juntos como comunidad. El sentido de solidaridad creado a través de todo el proceso de desarrollo de las cooperativas de vivienda recién formadas implica que las personas se cuidan unas a otras. Esto también se extiende al apoyo financiero. Por ejemplo, si los padres de niños en las cooperativas mueren, sus pagos de vivienda serán cubiertos por los otros miembros de la cooperativa (a través de un Fondo de Socorro) durante un período de tiempo determinado en los reglamentos de las cooperativas. Las cooperativas en San Salvador llevan a cabo ‘días solidarios’ adonde se reúnen para contribuir al proceso constructivo con su comunidad. Además, estas jornadas incluyen también un almuerzo compartido como espacio para socializar y dialogar, y debates participativos sobre cómo realizar la transferencia del trabajo, de estrategias, metodologías, y el modelo cooperativo. Estas actividades fortalecen  el trabajo que cada cooperativa realiza y crea lazos fuertes entre los miembros.  Ahora son miembros activos de sus comunidades y redes a nivel local, nacional y regional que luchan por vivienda segura y adecuada para todos. El ser parte de una red nacional ha atraído a gente de cooperativas de todo el país a San Salvador para ayudar.

Los miembros de las cooperativas de vivienda tienen mayor confianza y están mejor preparados para liderar dentro de la comunidad. El 70% son mujeres, muchas de las cuales tenían previamente pocas oportunidades. Se establecieron dos nuevas escuelas para capacitar a miembros de cooperativas (financiadas por WeEffect) sobre el compromiso político y sobre cómo manejar una cooperativa exitosa, para ayudar a que esto continúe.

Los nuevos edificios y mejoras en los espacios públicos han revitalizado el centro histórico de San Salvador para beneficio de toda la comunidad. El involucramiento de las nuevas cooperativas de vivienda en FPDICHSS (el Foro Permanente para el Desarrollo Integral del Centro Histórico de San Salvador) ha fortalecido la habilidad de la comunidad de trabajar juntos. Ellos organizaron festivales de barrio, y llevaron a cabo mejoras en espacios públicos, como parques y plazas. Los jóvenes han sido alentados para participar a través de actividades tales como torneos de fútbol, pintado de murales y jornadas artísticas y culturales de música y teatro popular. Además, entre FUNDASAL y el Museo de los Niños “Tin Marín” se ha establecido un convenio para brindar acceso a la educación y cultura para la población local y de los alrededores.

Obstáculos Encontrados

La gente que vive en asentamientos informales en el centro histórico ha sido históricamente excluida de la toma de decisiones en la sociedad. Inicialmente esto impedía a los residentes participar activamente en la comunidad y generalmente llevaba a conflictos o desconfianza. Sin embargo, los primeros miembros de cooperativas en construir vivienda mejorada para sí mismos en San Salvador (ACOVICHSS) demostraron lo que era posible e inspiraron a otros a participar.

Antes de 2008 faltaba apoyo financiero del gobierno para vivienda y no había un marco legal apropiado. Esto fue superado a través de colaborar con FESCOVAM (la federación salvadoreña de cooperativas de vivienda por ayuda mutua) para convencer al Gobierno de realizar los cambios necesarios y proporcionar tierras y financiamiento. La reinvención del centro histórico también ayudó a provocar interés en el proyecto y aumentó el apoyo para los cambios en políticas públicas. Sin embargo, una mayor expansión de ese modelo es limitada si el apoyo del Gobierno se discontinúa en el futuro o si se subestima la capacidad de la gente de ayudarse a sí mismos.

Los primeros lotes de tierra seleccionados por las cooperativas de vivienda para la nueva fase del proyecto (a ser financiada por el Gobierno salvadoreño) no alcanzaron los requisitos para su desarrollo. Esto fue superado a través de identificar tierras alternativas para que la construcción pudiera seguir adelante.

Lecciones Aprendidas

  • Las próximas cooperativas en construir están desarrollando formas con las cuales el Estado garantice de manera más sostenible y segura financiamiento y mecanismos de acceso al suelo para que más cooperativas de vivienda puedan construir sus proyectos en el futuro.
  • Construir hacia arriba y no hacia afuera ayuda a desacelerar la expansión de áreas urbanas y funciona como una forma de revitalizar los centros históricos.
  • El trabajo de FUCVAM (la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua) para capacitar nuevas cooperativas de vivienda por ayuda mutua en El Salvador demuestra que el enfoque puede ser adaptado a los contextos locales, adonde los desafíos pueden ser distintos, pero sigue siendo relevante mantener el modelo de ayuda mutua y presionar al gobierno para lograr legislación y financiamiento adecuados.
  • Alentar a muchas personas y organizaciones distintas na trabajar juntos es una forma efectiva de lograr una diferencia en las condiciones de vivienda de la gente.

Evaluación

  • FUNDASAL evalúa el proyecto a través de considerar una variedad de indicadores, incluyendo:
    • La participación y el empoderamiento de las mujeres (cantidad de mujeres en puestos de gestión; cantidad de mujeres financieramente independientes, habilidades adquiridas).
    • Cantidad de solicitudes exitosas de financiamiento y tierras.
    • Cantidad de personas que recibieron capacitación.
    • Cantidad de actividades sociales que ayudan a fortalecer las cooperativas de vivienda.
  •  Las cooperativas de vivienda llevan a cabo evaluaciones internas por sí mismas, además de evaluaciones externas independientes organizadas por FUNDASAL.

La evaluación encontró que:

  • Las mujeres fueron empoderadas para participar y aumentar el liderazgo a través del proyecto.
  • El trabajo resultó en vivienda segura y asequible para los habitantes del centro histórico de San Salvador, quienes vivían en muy malas condiciones.
  • El proyecto ha fortalecido la confianza de los miembros de las cooperativas de vivienda para trabajar juntos para tomar el control de su propia vivienda.
  • Debido a que aquellas personas involucradas en el proyecto ganaron confianza para expresar sus opiniones en cuanto a las políticas, esto ayudó a lograr el reconocimiento legal de parte del Gobierno Salvadoreño, ayudando a conseguir los derechos de vivienda de sus ciudadanos.

Reconocimiento

La regeneración del centro histórico de San Salvador recibió dos premios por mejores prácticas y obtuvo significativa atención en los medios.

  • 2008 – Premio Nacional de Urbanismo (otorgado por el Viceministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano) y Premio Mejores Prácticas Internacionales (entregado por el Centro Cooperativista Sueco – ahora WeEffect).
  • 2010 – Premio de Mejores Prácticas de Dubai entregado a FUNDASAL por la Recuperación del complejo de viviendas en el Centro Histórico de San Salvador.
  • Veinticinco artículos sobre el proyecto en periódicos.
  • Muchas entrevistas de TV y radio.

Transferencia

Como resultado directo de este programa ahora existen 13 cooperativas de vivienda por ayuda mutua en el centro histórico de San Salvador. El trabajo ha inspirado a otros, y FUNDASAL está compartiendo su experiencia para ayudar a transferir el enfoque. Esto está sucediendo en otros centros históricos en El Salvador, tales como Suchitoto en Cuscatlán, y Zacatecoluca en La Paz – adonde actualmente se está estableciendo un modelo financiero flexible. El gobierno local en Los Nonualcos está trabajando para promover los derechos de vivienda y ha desarrollado un plan para revitalizar sus propios centros históricos. Los dos centros de capacitación (enfocados en el involucramiento político y el desarrollo de cooperativas) establecidos por el proyecto fortalecerán el conocimiento y la capacidad de las cooperativas de vivienda en la región.

Hasta ahora, FUNDASAL, a través de su interrelación y trabajo junto a las organizaciones de segundo grado de las cooperativas de vivienda de la región centroamericana que integran la COCEAVIS, también ha brindado asesoría y capacitación a 65 cooperativas de vivienda por ayuda mutua a través de América Central; en Nicaragua, Guatemala, Honduras, Costa Rica y México, lo cual incluyó lecciones de este proyecto. También están intercambiando experiencias con organizaciones que trabajan en la regeneración de Hebrón, en Palestina. Además, FUNDASAL está brindando financiamiento para COCEAVIS para comprar tierras en Guatemala y Nicaragua.

La revitalización del centro histórico de San Salvador influenció al Gobierno salvadoreño para continuar apoyando e invirtiendo en nuevas cooperativas de vivienda por ayuda mutua. Esto se encuentra explícito en documentos oficiales de políticas, incluyendo su plan de desarrollo de cinco años para 2014-2019.