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En pocas palabras, la situación para las personas sin hogar en Bratislava es mala. Los cálculos muestran que hay 5.000 personas sin hogar y la mayoría está viviendo en las calles. En Bratislava, existen sólo tres refugios que son apenas lo suficientemente grandes para alojar alrededor de 250 personas…y eso es todo. Esto significa que todos los demás están durmiendo a la intemperie o en alojamiento inseguro.

Además, la cantidad de servicios de apoyo es muy pequeña y no puede parar la arremetida de nuevas personas que terminan en las calles de la ciudad cada día. No existen servicios de prevención por un lado, y no hay servicios extra ‘integradores’ por el otro.

El mayor problema que enfrentamos es – en nuestro país no hay una definición legal de sinhogarismo. Y si no tenemos una definición para aquellos a quienes estamos intentando ayudar, no podemos definir y brindar servicios para ellos, ya que las personas sin hogar ‘no existen’. Pero como sabemos muy bien, sí existen personas sin hogar allí afuera, y son muchas.

Entonces, ¿qué debemos hacer?

Nuestra meta inmediata es ser escuchados. El momento de debates tras bastidores y conversaciones concertadas ya ha pasado. Este problema y las ‘soluciones’ no se han movido hacia ningún lado a través de los años. Así que ahora apuntaremos al sinhogarismo y lo nombraremos de manera clara y comprensible. Esta definición de personas sin hogar debería haber existido desde hace mucho tiempo, y sólo entonces podrá suceder algo positivo.

La Campaña Europea para Terminar con el Sinhogarismo en las Calles nos muestra que la situación para las personas sin hogar puede mejorarse y que es posible finalmente disminuir el sufrimiento de las personas en exclusión social extrema. Para mañana hemos planeado un Día de Acción. Durante este día hablarán muchos representantes de distintas organizaciones, habrá música callejera, y finalizará con un ‘tiempo de pausa’, cuando ‘congelaremos la plaza’ usando máscaras blancas durante un minuto. Esto es un símbolo estar perdido y de ser anónimo. “No nos ven, pero estamos aquí entre ustedes”.

Junto a nosotros habrá un fuerte grupo de diversos colaboradores. Estos incluyen a la ONG PRIMA, quienes apoyan a consumidores de drogas y trabajadores sexuales, y Teatro sin Barreras. Además, habrá una cantidad de empresas más pequeñas y otros colaboradores – individuos y grupos comunitarios – de la sociedad ‘común’. Juntos nos convertiremos en una herramienta eficiente para comunicar, compartir y construir nuevos enfoques en el futuro. Pero aún estamos muy lejos de eso.

Me preocupa que, a pesar de nuestros esfuerzos, el estado nos ignorará. Ellos no nos escuchan, y temo que no quieren escucharnos – ¡no les importan las personas sin hogar porque ellas no pueden votar!

Pero esto no nos detendrá de nuestro Día de Acción y tendremos éxito si atraemos a los medios y si, al mismo tiempo, podemos lograr apoyo de otros países. Entonces el estado ya no podrá ignorarnos a nosotros y a los miles de ciudadanos que no tienen hogar.

La esperanza es hermosa. Y lo que espero que pase luego del Día de Acción de mañana es que seamos contactados por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales de la República de Eslovaquia. Espero que ellos nos pidan que presentemos los documentos pertinentes (por ejemplo, tipología de personas sin hogar, re-alojamiento rápido, etc.) a partir de lo cual evaluarán y aprobarán los recursos para que nosotros trabajemos con ellos.

También, y esta es la imagen global, sería un éxito para nosotros si, como país, comenzamos a tratar a las personas sin hogar con el apoyo que necesitan. En muchas áreas, nuestro país está brillando positivamente, así que es hora de que brillemos en esta cuestión también. Y debemos hacer esto porque la amenaza de la ‘inspiración’ de cómo nuestro país vecino Hungría está tratando a sus personas sin hogar da miedo y nos preocupa mucho. Nunca debemos ir en esa dirección. No podemos, por supuesto, hacer a alguien ilegal en base a su estatus social. ¡Eso es inaceptable!

¡No somos invisibles!


¡Súmese al debate!