Lo que Ámsterdam nos enseñó

Dave Davies es líder del equipo de Vivienda Primero en Shekinah, parte de la Campaña Europea para Terminar con el Sinhogarismo en las Calles, en Torbay, Reino Unido. Aquí, habla sobre el impacto de su visita reciente a Discus, proyecto ganador del Premio Mundial del Hábitat de Plata, en Ámsterdam.

En noviembre, tuve la oportunidad de pasar un tiempo con Marcel, David y Carl, tres personas que recibieron asistencia de Discus Vivienda Primero en Ámsterdam. Como miembro del equipo de Vivienda Primero de Shekinah en Torbay – que solo estuvo operativo durante aproximadamente ocho meses – esta fue una oportunidad de pasar tiempo con una organización que está brindando asistencia con éxito mediante Vivienda Primero desde hace 15 años.

Primero, estuvimos con Carl en Lindehoff, una granja en funcionamiento que ofrece oportunidades de trabajo a personas con experiencias de sinhogarismo. Carl tiene un trabajo de media jornada allí y nos mostró los túneles de polietileno en los que se cultivan productos de alta calidad para algunos de los mejores restaurantes de Ámsterdam – ¡hasta hicimos una degustación improvisada! Nos contó sobre su viaje del Reino Unido a Ámsterdam, sobre cómo se quedó sin hogar y sobre la diferencia que implicó para él tener una vivienda permanente y asistencia de Discus.

Marcel nos recibió en su casa, donde vive hace 10 años. Explicó que después de mudarse, le llevó siete meses aceptar que tenía un hogar permanente —un recordatorio desgarrador de cuán difícil puede ser la transición para superar el sinhogarismo. Originario de Surinam, Marcel visita a su madre y a su familia ampliada allí con frecuencia, y ellos le brindan apoyo para enfrentar antiguos problemas de su vida. Marcel nos aconsejó que no apuremos a las personas a las que les brindamos asistencia, e hizo hincapié en la necesidad de brindar apoyo durante el tiempo que la persona lo necesite – tendremos en cuenta este consejo para todos los trabajos que hagamos en el futuro.

Por último, nos reunimos con David, que lleva cuatro años viviendo en su apartamento. Su descripción de las diferentes posibilidades a las que pudo acceder en su vida gracias a que tiene un lugar permanente donde vivir fue elocuente. Descubrió que sus amigos eran las personas que lo respetaban y sus vecinos. Se dio cuenta de que ya no necesitaba ir a fiestas y quedarse hasta el final, ya que podía volver a casa cuando quería. También descubrió una afición por la ropa que no sabía que tenía, y nos mostró con orgullo su asombrosa colección. David nos aconsejó que cuando coordinemos una cita para una persona, “le estemos encima constantemente y le preguntemos una y otra vez si está bien”, para asegurarnos de que no se sienta incómoda ni desilusionada.

También visitamos varios proyectos comunitarios, incluido un hostel que ofrece alojamiento temporario y a largo plazo; MDHG, una organización dirigida por sus integrantes, que lucha por los derechos de las personas que consumen drogas ilícitas; y un “Proyecto de heroína” financiado por el gobierno. Todas las visitas fueron interesantes e instructivas, pero estar junto a los miembros de MDHG nos recordó lo importante que es involucrarse con personas que tienen experiencias vividas en el diseño, el desarrollo y la prestación de servicios. Por ejemplo, Marcel y David son “embajadores” de Discus, ya que pueden explicar cómo son las intervenciones de Vivienda Primero, y cómo revolucionan la vida de la gente, de manera mucho más efectiva que cualquier otra persona. Esto es algo que nosotros también exploraremos a medida que desarrollemos nuestro servicio.

También asistimos a una reunión del equipo de Discus y a talleres específicos sobre la aplicación práctica de los principios de Vivienda Primero. Esto nos permitió obtener información detallada sobre el trabajo diario que hacen, la metodología y las herramientas que utiliza el equipo, la manera en que este se estructura, la forma en que sus integrantes se apoyan entre sí, y la manera en que incorporan a su servicio la flexibilidad y la preferencia por las personas. Un buen ejemplo de esto es el “mercado de perfiles”, un mecanismo que utilizan las personas que reciben apoyo de Discus para encontrar el trabajador que mejor satisfaga sus necesidades de asistencia. Esto les otorga el poder de elegir y el control.

Nos asombró la importancia que se le da en Discus a la celebración de eventos significativos en las vidas de las personas – como cuando reciben las llaves de su nueva vivienda. Esto los ayuda a construir recuerdos positivos y a reforzar los lazos positivos que ya existían. Es interesante que, según la experiencia de Discus, no todo el mundo se siente cómodo con una celebración, lo que nos recuerda que cada persona es singular y que la asistencia que brindamos siempre debe adaptarse a las necesidades particulares de cada individuo.

En las sesiones también se destacaron problemáticas comunes que enfrentan las personas que reciben apoyo de Discus, las personas a las que brindamos asistencia en Torbay y las personas que utilizan servicios de Vivienda Primero en toda Europa – por ejemplo, soledad, problemas de malestar con el barrio y administración del dinero. Estos problemas son universales y no tienen una solución sencilla. Los miembros de Discus ya participan en un trabajo paneuropeo que explora maneras efectivas de brindar asistencia a las personas que se sienten solas, y esperamos ver los frutos de este trabajo en el futuro.

Nuestra visita fue interesante, desafiante y divertida. Aprendimos cosas nuevas sobre nosotros mismos y sobre nuestros compañeros, y esto hace que nos sintamos más unidos como equipo. Queremos agradecer a Discus, y en especial a Marcel, David y Carl, por su hospitalidad y su generosidad.